Una combinación con muchas ventajas

Si combinamos abrasivo y agua podemos limpiar, preparar, decapar, desbarbar y mucho más con un cuidado especial.

El chorreado húmedo es especialmente adecuado para piezas delicadas y fabricadas con precisión. Este método no solo es suave, sino también eficaz, ya que la capa protectora de agua reduce el consumo de abrasivo durante el chorreado húmedo. Además, se evita la formación de polvo y también se pueden utilizar abrasivos muy finos. El chorreado húmedo también permite tratar materiales cuyas partículas no deben liberarse al aire por motivos sanitarios.

Para obtener un resultado de chorreado especialmente uniforme, la boquilla de chorreado de los sistemas de chorreado húmedo de Rösler se controla a través de un robot industrial o un sistema CNC. También adaptamos la carga y descarga a sus necesidades individuales de producción, automatizándolas de diversas formas si así lo desea.